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Autoconvocados del campo leyeron una proclama en Plaza de Mayo. Castigan a los jefes de las provincias por «aceptar el saqueo de sus actividades productivas».

La protesta de productores autoconvocados del campo de este sábado a la tarde en la plaza de Mayo en Capital Federal finalizó con la lectura de un documento acordado entre las entidades convocantes, que castigó duramente al gobierno nacional de Alberto Fernández y también responsabilizó a los gobernadores y legisladores de las provincias por la situación del sector, que, dicen, vive una «opresión impositiva».

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El Tractorazo incluyó a productores de la Región Centro, la provincia de Buenos Aires y distritos del norte como Tucumán, Salta, Santiago del Estero y Catamarca. Concentraron en la avenida 9 de Julio y si dirigieron a plaza de Mayo, donde leyeron una «proclama» frente a la Casa Rosada.

“No hemos venido hasta acá para pedir que nos den una mano sino para que nos saquen las dos de encima. Traemos una proclama sencilla: No estamos dispuestos a seguir financiando la soga con la que nos ahorcan”, ilustraron.

“Somos de los pocos y raros países con desdoblamiento cambiario y retenciones… padecemos además 170 impuestos que agobian a todas las actividades productivas y terminan sumándose a los precios que paga el consumidor», manifestaron. Y pidieron al gobierno: «Anímense a pensar un país con menos impuestos. Gasten menos. Arréglense con lo que tienen o dedíquense a otra cosa”.

La protesta no fue sólo contra el gobierno nacional del Frente de Todos. Incluyó cruces a las autoridades y representantes del Interior. «Somos responsables de haber tolerado estos disparates. Son responsables también muchos de nuestros gobernadores y legisladores. Han resignado la autonomía federal por una indigna alianza de vasallaje feudal, en la que aceptan el saqueo de las actividades productivas de sus coprovincianos a cambio de ser tratados como mendigos de lujo por el Poder Central y eventualmente ser nuevamente ungidos”.

Luego de las demandas referidas al sector agrícola, el documento cerró con una serie de consignas variada y bastante desordenada que, en general, muestran un rechazo generalizado al kirchnerismo.

“Basta de mentiras. Basta de fronteras que son un colador. Basta de entregar nuestro Mar Austral a la depredación. Basta de soltar presos y perseguir policías. Basta de someter a alumnos y maestros a la dictadura de ideólogos y burócratas. Basta de vándalos y usurpadores. Basta de opresión impositiva. Basta de sarasa”, concluyó el texto leído en plaza de Mayo.

La protesta rural no contó con el aval institucional de la Mesa de Enlace. La conducción de la Federación Agraria votó en contra de la adhesión. Las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) se mantuvo al margen. Su líder, el entrerriano Jorge Chemes, puso distancia con la metodología: «hay otros caminos. Hoy el trabajo institucional que se está haciendo con diputados, senadores y gobernadores es un trabajo que puede surtir mucho más efecto, porque nuestros reclamos se pueden transformar en leyes», dijo al portal Bichos de Campo.

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