Con el desarrollo pleno de este Niño tardío en todas las regiones, se están produciendo complicaciones y retrasos en la cosecha de pecanes producto de las lluvias periódicas.
En la zona central, además, se está dando una compactación de la madurez de las distintas variedades lo que está provocando caída de nueces en muchos lugares.
Desde el Cluster del Pecán indican además que es un año donde será clave cosechar lo más rápido posible y secar inmediatamente para evitar o disminuir al menos la pérdida de calidad de nuestra cosecha.
Asimismo sobre el final del ciclo y, por las condiciones ambientales predisponentes, han avanzado las enfermedades fúngicas tanto en frutos como en hojas. Esta traerá un aumento en la carga de inoculo para la próxima temporada por lo que debieran preverse tratamientos invernales y también, en el caso del leaf scorch, puede afectar el nivel de acumulación de reservas para la próxima temporada.
En su informe de situación, Valentina Maurig da cuenta que en el norte entrerriana ya se están cosechando las variedades tempranas como Shoshoni y Pawnee. En esta última variedad se están registrando muy bajos rendimientos y en Shoshoni variable, algunas muy cargadas y otras, poco. Comienzan a madurar otras variedades como Desirable y Cape Fear y algunas Kiowa como para dar continuidad a la cosecha. En general buenos calibres y buen llenado pero pocas unidades por planta. En el último tiempo se están observando desarrollos de sarna que no se habían registrado durante la temporada, producto de las últimas lluvias y ya pocas pulverizaciones. Los montes que han sido bien fertilizados todavía muestran el follaje sano y verde; mientras que los que han tenido bajas fertilizaciones ya comienzan a amarillear y entrar a otoñar.
Por el centro Sur de Entre Ríos, Mariano Marcó precisa que desde principios de mes se inició la cosecha de las variedades más tempranas como Pawnee, Shoshoni, Choctaw, Harris Súper y Cape Fear. Es un año complicado para cosechar ya que después de las abundantes lluvias registradas en la segunda quincena de marzo los suelos están prácticamente saturados. Durante este mes se vienen dando, casi en forma constante, lluvias durante todas las semanas, en algunos casos pequeñas (no más de 15 mm) pero al caer sobre un suelo ya saturado hace que se complique la cosecha por falta de piso para circular con la maquinaria.
En torno a lo que sucede en el sudoeste de Entre Ríos, Carolina Holzheier aporta que luego de las importantes lluvias que se observaron durante la primera quincena de abril, las condiciones del tiempo mejoraron, pero no cesó la recirculación de aire húmedo hacia fin de mes. Es decir, la condición meteorológica ha mejorado en cuanto a que han cesado las lluvias de volumen innecesario, sin embargo, todavía no se presenta una condición ambiental que pueda considerarse satisfactoria; días grises y llovizna. Se largó la cosecha en la segunda semana de abril, comenzando por Shoshoni y Pawnee, logrando cosechar alrededor de un 50%. Según los primeros registros, los rendimientos vienen bien, con excelente llenado (en contraposición de la campaña pasada) y buen tamaño de nuez, con lotes muy homogéneos. Habrá que tener paciencia en estos últimos días de abril, esperando una ventana de tiempo un poco más seca en los primeros días de mayo, con mayor luminosidad y menos humedad. Destaca un adelanto de unas semanas en la cosecha, y lotes bien manejados con abundante follaje verde. El resto de los cultivares, Mahan, Mohawk, Oconee, Sumner están comenzando a abrir los rueznos. Actualmente, los productores se encuentran acondicionando la nuez, en sus galpones, para bajar la humedad del producto.