Evaluaron sus implicancias en una mesa de diálogo virtual el Ing. Eduardo Terrado y el presidente de CAPPER, Francisco Benedetti, con la moderación a cargo del diputado provincial Julián Maneiro. Auditorio numeroso y presencias importantes del ámbito político y productivo.
La posibilidad de firmar un acuerdo comercial para instalar en nuestro país granjas de producción de cerdo que provean a China de miles de toneladas de carne en cuatro años, frente al actual contexto de crisis económica, con la posibilidad de generar enorme cantidad de puestos de trabajo, suena tentadora. Pero se desconoce de qué trabajo hablamos, en qué condiciones, para quiénes y a qué costo social, ambiental y para la salud de la población.
¿Está nuestro país institucionalmente preparado? ¿La legislación provee un marco adecuado para regular estos acuerdos? Para responder estas preguntas, el viernes 21 de agosto se llevó a cabo, vía Zoom, la mesa de diálogo “La producción porcina en Entre Ríos y el posible acuerdo con China. Evaluación de su impacto provincial”.
Los expositores fueron el Ing. en Producción Agropecuaria, Asesor privado en Producción y Ex director de Producción Porcina de la provincia de Buenos Aires Eduardo Terrado y el Presidente de la Cámara de Productores Porcinos de la Provincia de Entre Ríos Lic. Francisco Benedetti, siendo el moderador el diputado provincial y Presidente de la Comisión Economías Regionales de la Cámara, Julián Maneiro.
Hubo una excelente convocatoria para la propuesta, con un auditorio de 80 computadoras encendidas, y la presencia de actuales y ex funcionarios y legisladores provinciales y nacionales, productores, técnicos y referentes de distintos sectores. Les dio la bienvenida desde su despacho el intendente de Crespo Darío Schneider, que también participó activamente de la jornada.
Principales conceptos
Deficiencias y oportunidades que se generan, fueron parte de las presentaciones de los oradores. Francisco Benedetti se mostró cauto a la hora de analizar el impacto de la iniciativa. Remarcó:
• “Los últimos años reflejan un gran cambio en los hábitos de consumo. Hay una tendencia que marca que cada vez más se consume cerdo y pollo y menos vacuno. Se da por el crecimiento de carne fresca de cerdos en gran medida. A diferencia del mundo, en Argentina lo que más se consume es carne vacuna, pollo y luego cerdo. Pero a nivel mundial el cerdo aparece primero”.
• “En los últimos diez años la producción se duplicó, pero en Entre Ríos se cuadriplicó. Somos la provincia que más creció en cuanto a cantidad de madres y somos de las más eficientes. Somos la cuarta a nivel nacional en producción y faena, mirando en número de cabezas. Buenos Aires es la única que tiene más faena que producción. En Córdoba se faena el 62%, en Santa Fe el 98 y en Entre Ríos el 44$, por lo que hay que seguir creciendo”.
• “China en 2019 estuvo marcado por la Peste Porcina Africana. Fue un acontecimiento inesperado que cambió todo. El 60% de la producción mundial fue afectada. Antes, la situación en China era una. Hoy es otra. Bajó la producción y subió la importación por ese contexto. Están con necesidad de proteínas cárnicas y la oferta mundial no puede satisfacer ese total requerido”.
• “Las razones para apostar a la producción porcina son muchas: la alta demanda mundial de proteína animal, principalmente cerdo; que el cerdo es una “máquina de producir carne”, ya que una cerda tiene de 2 a 4 partos al año, lo que significa una producción de 3800 kilos por año promedio; el subproducto, que es el purín; la rapidez en el proceso biológico, ya que está la posibilidad de duplicar la producción nacional en dos años; que alienta la rotación de cultivos, ya que el principal insumo en la producción es el maíz; y que el sector porcino argentino tiene uno de los mejores status sanitarios del mundo, libre de enfermedades importantes a nivel productivo”.
La gran transformadora
Establecer reglas de juego claras, para no perjudicar a los pequeños y medianos productores, es la premisa. Cualquier crecimiento o desarrollo del sector tiene que ser de manera armónica, siempre teniendo en cuenta la sustentabilidad del sistema. Eduardo Terrado, en ese contexto, destacó:
• “La producción porcina genera y multiplica todo lo que toca. Es la gran transformadora. El 28 por ciento de la producción está en Buenos Aires. Entre Ríos empezó a sumar fuerte, hoy con el 7%”.
• “Conclusiones hay muchas, positivas y negativas. Entre los puntos flojos, no hay decisión política para el verdadero desarrollo del sector; ni una legislación adecuada; y hay falta de políticas ambientales y de inversiones. Pero lo bueno es el nivel técnico, nutricional y las instalaciones, excelentes a nivel global; el status sanitario también es excelente”.
Su análisis lo llevó a comparar la situación de la Argentina con Brasil. “Ellos tienen, como nosotros, en el cinturón maicero la mayor producción de cerdos. Es un productor que tiene posibilidades de crecer, potencialmente es el mayor productor y exportador de carnes del mundo, y es fundamentalmente un socio para acompañar, porque tienen orden productivo”, dijo Terrado.
Quedó claro además que las preocupaciones tienen que ver también con el status sanitario. Uno de los pedidos, si esto avanza, es que los animales no vengan de China ni de ningún país con Peste Porcina Africana, Peste Porcina clásica o alguna de las principales enfermedades que afectan a la producción mundial y que no las tenemos en la Argentina.
Conclusiones
• Entre las coincidencias de los disertantes y el auditorio, quedó claro que la que aparece es una gran oportunidad, pero también es un gran desafío. Es que más allá de que el gobierno da la legislación pertinente, el acuerdo es entre privados, y debe haber acuerdos entre ellos. Para eso es fundamental una red de contención en la legislación sanitaria, ambiental y productiva, que garantice el éxito y deje la tranquilidad de que “no terminaremos con problemas” si algo falla.
• Preguntas surgen permanentemente. ¿Qué pasa si en un par de años los chinos se van? Son preocupaciones que entre todos los interesados deberían resolver. Hay más dudas que certezas. Y se necesita un financiamiento acorde. ¿Lo logrará la Argentina?
• Entre los pros, está claro que hay en el país y en nuestra provincia un gran potencial. Pero qué haríamos con esa producción y cómo afectaría a nuestro mercado interno si los chinos dejan de comprar, es la gran pregunta. Será fundamental, además, que no llegue “más producción con menos productores”.
Lo que puede venir
A modo de cierre, el propio Maneiro sintetizó conclusiones: “Se abre una gran oportunidad para nuestra provincia. Pero hay mucho por hacer. Falta un plan estratégico, financiamiento y mejores estructuras tributarias. Hay un gran porvenir, pero también enormes preguntas. Hay necesidades de orden e infraestructura. Hay que cuidar lo que tenemos y cuidar a los productores”, dijo.
“Si se avanza, debe ser apuntando a planteamientos sustentables y cuidando el medio ambiente, con una clara legislación y control del impacto ambiental, y con la transformación adecuada de efluentes y residuos, ya sea como abono o biogás. Entre Ríos debería apostar a generar más valor agregado, aportando además financiamiento y políticas tributarias acordes y que necesariamente deben tenerse en cuenta. Sin esto, es dificultosa la realización del proyecto”, agregó. Y dejó en claro que “no son conclusiones definitivas las logradas, pero la Mesa de Diálogo fue un puntapié para empezar a pensar qué hacer y cómo hacerlo”.