A días de la entrada en vigor del troceado, el gobierno se mantiene sin atender las advertencias de industriales de la carne acerca de su imposibilidad de instrumentar la norma anunciada hace ya casi dos años.
Lo cierto es que, oficialmente, la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, a través de la Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario (DNCCA), informó que el 1 de noviembre los despachos de carne de todos los establecimientos faenadores del país destinadas a comercio minorista, deberán hacerse en unidades resultantes del fraccionamiento de las medias reses en trozos, cuyos pesos individuales no superen los 32 kilogramos.
Siguen con que el cumplimiento de la normativa, dictada por las carteras de Trabajo, Empleo y Seguridad Social; de Desarrollo Productivo y de Agricultura, Ganadería y Pesca, mediante la resolución conjunta 4/2021, es de carácter obligatorio para todos los establecimientos faenadores de tránsito federal, provincial y municipal ubicados dentro del territorio nacional, sin excepciones.
En virtud de los planes presentados y las inspecciones realizadas por esta Dirección Nacional, se destaca el importante número de establecimientos identificados que ya se encuentran comercializando sus productos (medias reses en trozos) de conformidad con la normativa vigente indicada en el párrafo precedente.
Por otra parte, se informa que solamente podrán trasladarse medias reses de establecimientos faenadores a plantas habilitadas oficialmente como despostadero, fábrica de chacinados, fábrica de carnes y productos conservados y/o depósitos frigoríficos prestadores de frío. Todos estos establecimientos deben estar inscriptos en el Registro Único de la Cadena Agroalimentaria (RUCA) y contar con la habilitación sanitaria – comercial correspondiente.
Asimismo, la DNCCA informa que en cumplimiento de sus funciones y con el objetivo de garantizar el cumplimiento de la norma indicada para asegurar transparencia y equidad en la operatoria del sector, continuará con los programas de fiscalización a los operadores de la cadena de carnes. Estas actividades comprenderán inspecciones a plantas y depósitos, así como controles en los transportes y durante las descargas de carne, para verificar el correcto troceado y transporte junto con la identificación de cada uno de los trozos producto del fraccionamiento de la media res, en cumplimiento con la Resolución SAGPyA 400/2001.
Se advierte que a partir de la fecha indicada todos aquellos establecimientos y operadores que no cumplan con la normativa vigente serán objeto de sanciones, las cuales pueden incluir multas, clausuras y/o suspensiones de matrícula en el RUCA, entre otras. En este marco, es destacable el rol del Senasa en las tareas conjuntas para el control y cumplimiento de la normativa.
Por último, se subraya que tanto las normas sobre troceado de medias reses destinadas al comercio minorista como los programas de fiscalización diseñados para verificar su cumplimiento, tienen como objetivo promover condiciones de trabajo saludables para los trabajadores de la industria de la carne que se encargan de su descarga. Asegurar condiciones laborales dignas es también uno de los objetivos de esta Dirección Nacional, en particular cuando otras actividades del sector ya han adaptado sus normas y procedimientos operativos para propender al cuidado de la salud de los trabajadores.
Vale recordar en este sentido que el Ministerio del Trabajo, Empleo y Seguridad Social, en el año 2003, reconoció los trastornos de salud relacionados con el trabajo y aprobó (mediante Resolución MTEySS 295/03) especificaciones técnicas sobre ergonomía y levantamiento manual de cargas. Posteriormente, se dictaron normas específicas para la industria de la carne en el año 2020, cuya implementación no ha avanzado en la medida deseada, por lo cual la cartera agropecuaria nacional participó reforzando las acciones mediante la mencionada Resolución Conjunta 4/2021 y la Resolución Conjunta 10/2021.