«No nos vamos a quedar callados viendo como nos roban el futuro, ya lo vivimos muchas veces, con esa forma de concebir el poder que muchos argentinos rechazamos. ¡Basta de eso!», lanzó Macri al encabezar la «Marcha del Millón».
El presidente Mauricio Macri encabezó este sábado un acto multitudinario frente al Obelisco porteño, donde afirmó que las elecciones del 27 de octubre definirán «el futuro del país por muchos años» y profundizó la confrontación con el kirchnerismo, con el objetivo de forzar un balotaje y mantener vivas las chances de ser reelecto.
La «Marcha del Millón» no alcanzó a reunir esa cantidad de gente, pero en el comando de campaña de Juntos por el Cambio dejaron trascender que unas 600 mil personas se acercaron al Obelisco, mientras que en el lugar podía observarse que la concentración más fuerte llegó hasta la calle Viamonte, a tres cuadras del monumento porteño.
Macri arribó al lugar poco antes de las 18:30 y se acercó caminando entre la gente al escenario que se montó de frente a la zona norte de la Ciudad de Buenos Aires, donde estuvo acompañado por su compañero de fórmula, Miguel Pichetto, y la primera dama, Juliana Awada.
«Todos sabemos que el domingo 27 es la elección real y no es cualquier elección: es la que define el futuro por muchos años», subrayó Macri y agregó: «Lo que se define es mucho más que si gana un candidato u otro, se define en qué país vamos a vivir.
Esa frase fue casi la conclusión de un discurso que tuvo una línea clara de confrontación con el kirchnerismo y que intentó marcar un contraste con el gobierno de Cristina Kirchner (ahora candidata a vice de Alberto Fernández), con el objetivo de poder remontar la derrota por 15 puntos que sufrió en las primarias y forzar un balotaje.
«No caigamos en espejismos, en las mismas promesas vacías de los que tantas veces nos defraudaron», arengó el mandatario y, en una alusión a la gesticulación con el dedo índice que le reprochó a Fernández durante el debate del 13 de octubre, agregó: «No aceptamos que los que destruyeron el país ahora nos digan con el dedo en alto que ellos son los que saben».
En el mismo sentido, el jefe de Estado remarcó: «No nos vamos a quedar callados viendo como nos roban el futuro, ya lo vivimos muchas veces, con deditos, con atril, con canchereada, con soberbia, con esa forma de concebir el poder que muchos argentinos rechazamos. ¡Basta de eso!».
Macri pidió a la concurrencia «reconocer» que forman parte de «una mayoría que muchas veces miró con miedo y en silencio la política» y que fue «regalando espacios, dejando el país en manos de unos pocos que fueron por todo», tras lo cual agregó: «Pero por suerte fuimos despertando, diciendo hasta acá llegaron».
Por otra parte, el Presidente hizo un reconocimiento a sus votantes y a los militantes de Juntos por el Cambio al destacar que «fueron los que crearon la marcha del Sí, se puede «, con la que el oficialismo revitalizó su campaña tras la derrota de agosto.
«Ese 24 de agosto cuando salieron a la calle a decirme que no estaba solo. Y hoy estamos acá para decirle que ustedes no están solos», agregó.
Agitando banderas argentinas, la gente que concurrió al acto coreó nuevamente las consignas que caracterizan a la campaña de Macri, desde el «Sí, se puede» hasta el «Mauricio la da vuelta», en referencia a la elección.