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Finalizó 22° en la segunda final del año que disputó este domingo el TC en Viedma. El piloto de Ford revirtió los magros resultados de la clasificación y la serie logrando avanzar en una carrera muy peleada y accidentada.
Ayrton Londero recuperó parte de su protagonismo el domingo en el marco de la definición de la segunda fecha del campeonato que disputó el TC en Viedma. Llegó a completar la final al arribar en el puesto 22 a la bandera a cuadros, que había otorgado, segundos antes, la victoria a Julián Santero.
Así, el piloto entrerriano cerró de manera positiva su paso por Viedma logrando sumar un total de 13 puntos con los que completa los 32 que lo ubican 22° en la tabla del campeonato, que es liderado por el mendocino (82,5 Pts.). La continuidad del torneo se dará el fin de semana del 6 y 7 de abril en Neuquén.
El ramirense expresó: «Tuvimos una buena final por lo menos, en la cual pudimos avanzar desde el puesto 37 después de largar. Fue una carrera friccionada y divertida pero me deja tranquilo que se dejó el 100%, volvemos tranquilos por ese lado. A seguir trabajando, nos falta evolucionar todavía bastante y adaptarnos al Ford para volver a ser protagonistas en la categoría».
«Con la mentalidad puesta en eso para la próxima fecha. Estoy agradecido con el equipo, con cada mecánico, el ingeniero, mi motorista, gracias a todos por el trabajo y la entrega del fin de semana. Principalmente un gran saludo a todos mis sponsors que me están acompañando siempre y aguantando a pesar de los resultados», destacó Ayrton.
Respecto a la accidentada carrera, dijo que «los relanzamientos son muy tensos, porque sabemos que todos queremos ir para adelante y avanzar. Se dan en un circuito que queda angosto, donde la huella también es una sola, entonces por ahí pelear las posiciones te puede llevar a hacer un trompo o a un toque innecesario, pero bueno, es parte de lo que puede pasar».
«Igualmente en este nivel todos queremos dejar todo y se puso áspera la carrera, pero bueno, había que ir con los ojos bien abiertos», apuntó Londero.
