Con alegría y emoción, los reyes magos recorrieron las calles de General Ramírez para entregarle un presente a los niños y abuelos.
El trayecto comenzó en la Casa Municipal de la Cultura y se extendió por el centro, barrio Evita, La Pradera, San Carlos, Sur y Malvinas Argentinas.
Fue una tarde sorprendente porque los niños dejaron todo lo que estaban haciendo para poder estar con Melchor, Gaspar y Baltasar. Algunos salieron enseguida de la pileta, otros se olvidaron de los juegos y unos tantos se despertaron efusivamente para recibirlos.
Cientos de gurises esperaron atentamente la caravana, afuera de sus casas, en el frente de los clubes o en los lugares de encuentro establecidos. Cada cuadra estuvo colmada de festejos, fotos y obsequios.