Comienzan este miércoles las capacitaciones en el marco del Protocolo de intervención ante situaciones que involucran a personas con crisis de salud mental y/o consumos problemáticos de drogas en el espacio público. Esta tarea se lleva adelante de forma conjunta a través de los ministerios de Seguridad y de Salud.
Se trata de uno de los puntos establecidos en las pautas firmadas por ambos ministerios para la implementación del protocolo, que busca brindar herramientas para el abordaje e intervención ante situaciones de salud mental y consumos problemáticos en la vía pública. Las capacitaciones estarán a cargo de la Dirección General de Derechos Humanos, con asesoría técnica del Ministerio de Salud.
«Iniciamos esta primera etapa que tiene que ver con la formación para poner en marcha el protocolo. Es una capacitación para personal de Salud y de la Policía de Entre Ríos que busca, además, formar formadores y poder así tener una capacitación constante en esta temática», subrayó el ministro de Seguridad y Justicia, Néstor Roncaglia.
Como dicta el protocolo, la fuerza policial y el servicio de Salud buscarán mantener a sus funcionarios actualizados en protocolos de intervención, manejo de crisis y sensibilización sobre el consumo problemático de drogas, con programas de capacitación sistemática y permanente en las escuelas, dirigidos tanto a los agentes en formación como a los efectivos en servicio.
En esta línea, Roncaglia mencionó que en Entre Ríos «era necesaria la creación de un protocolo de actuación ante crisis sufridas por personas, en materia de salud mental y consumo de drogas, protocolo que no existía en nuestra provincia»; y detalló: «Se trata de un margen de intervención, requisitos que van a tener tanto la Policía como los miembros de salud pública».
«Ante una persona que está sufriendo una crisis, la Policía y los efectores de Salud ahora tienen un protocolo que significa un mandato de intervención, cómo intervenir, cómo tratar a esa persona y cómo reducirla, al solo objeto de llevarla a un centro de atención especializado en Salud Mental», explicó.
«La importancia que tiene este protocolo es que fue creado de forma conjunta con el Ministerio de Salud, y esto es importante porque la Policía no es especialista en atención a personas en situaciones de crisis de salud mental o consumos problemáticos. Acá la intervención tiene que ser dual, si es en la vía pública, la fuerza policial, en coordinación con Salud Pública tienen que ser quienes intervengan», sostuvo Roncaglia.
La capacitación a efectores de Salud y Policía se desarrollará en cinco módulos, los cuales están destinados a formar formadores, para así replicar esta instancia en todo el territorio entrerriano.
El ministro de Salud, Guillermo Grieve, por su parte, sostuvo: «Esto significa un paso sólido y contundente en el marco de nuestro compromiso con la humanización de la salud para nuestros entrerrianos. Desde el Ministerio, a través de la Dirección de Salud Mental, participamos en la capacitación para las fuerzas de seguridad y personal de salud en el marco del protocolo, junto a otros sectores involucrados, para la corresponsabilidad y mejora en el accionar de cada área en estas situaciones tan apremiantes como lo son las de crisis en salud mental en la vía pública».
«Como novedad para la comunicación, brindamos el recurso de la línea telefónica 0800-777-2100 de orientación y apoyo en Salud Mental, para que sea un paso más en las pautas de intervención de fuerzas de seguridad. Por esta vía vamos a acompañar y asesorar al personal policial que llame, y vamos a promover la mejor atención y resolución de la crisis en la vía pública, en interrelación con el Sistema de Emergencias Sanitario y los efectores sanitarios a los cuales la persona atendida será derivada».
La capacitación comienza el miércoles 31 de julio, en la Escuela de Oficiales de Policía «Dr. Salvador Maciá» de Paraná. Contará con cinco módulos, los cuales se dictarán de forma presencial y virtual en el período de dos meses y medio. Se entregarán certificados a quienes completen el curso.