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El río Paraná recuperó casi un metro y medio en los últimos 15 días, debido a las lluvias en la cuenca alta y la apertura de compuertas de represas. Los pronósticos lo ubican encima de los dos metros en febrero.
Sin el final de la bajante histórica que lleva tres años a la vista, en los últimos días en río Paraná recuperó algo de altura y de caudal, subió por encima del metro, creció 1,5 metros en dos semanas y se proyecta que alcance los dos metros en los próximos días a la altura de la capital entrerriana, según los datos del Instituto Nacional del Agua (INA) y la Prefectura Naval.
El domingo 15 de enero en el puerto de Paraná la altura del río era de nueve (9) centímetros. Este lunes marcó 1,62 metros. Y la proyección de la Prefectura Naval, que monitorea a diario la altura del río en todos los puertos, es una altura de 2,17 metros para el 7 de febrero.
El regreso de algunas lluvias en los últimos días y las represas de Itaipú (Brasil) y Yacyretá (Argentina-Paraguay) explican el recupero de aguas.
Según el informe semanal del INA, durante la última semana se observaron precipitaciones moderadas a leves sobre toda cuenca del río Paraná. En el tramo Corrientes – La Paz el nivel permaneció en ascenso durante toda la semana, en respuesta principalmente al aumento del derrame de Yacyretá y se espera que sostenga un acotado ascenso en el derrame durante los próximos días.
El organismo nacional aclara que la futura evolución dependerá fuertemente de las lluvias en las cuencas del río Iguazú, del embalse de Itaipú y del tramo misionero-paraguayo del río Paraná. «Lo más probable es que persista la tendencia al aumento de los niveles durante la próxima semana», indica.
En el mismo sentido, en el tramo La Paz – Santa Fe, los niveles comenzaron a aumentar y actualmente registran ascenso dentro del rango de aguas bajas hacia medias en todo el tramo inferior.
El Instituto observa que, si bien las condiciones son en general mejores que las observadas en los últimos tres años, «la perspectiva climática aún no permite definir un límite temporal del escenario de aguas bajas iniciado en marzo de 2020».
