El Servicio nacional de sanidad actualizó la normativa que establece el manejo de la enfermedad en todo el territorio argentino. Cuáles son las principales estrategias para evitar brotes de triquinosis.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) publicó este miércoles en el Boletín Oficial la Resolución N° 1035/2024, a través de la cual estableció el nuevo “Plan Nacional de Prevención y Control de la Infección por Trichinella spp”.
Se trata del parásito que provoca la triquinosis, una enfermedad que se transmite a los seres humanos de modo accidental, por la ingestión de carne o derivados cárnicos, crudos o mal cocidos, que contienen larvas musculares viables de Trichinella spp.
En general, la principal fuente de contagio es la carne de cerdo, y en su mayoría proviene de animales alimentados en malas condiciones sanitarias, como basurales.
NUEVO PLAN DE CONTROL DE LA TRIQUINOSIS
En este marco, el Senasa precisó que este nuevo plan reemplaza al que estaba vigente a través de la resolución 555/2006, y tiene como objetivo “reducir los casos en humanos a través de la detección temprana de animales parasitados y orientar las acciones sanitarias para el fortalecimiento de las producciones porcinas”.
En concreto,el principal cambio es que se busca hacer más ágiles y eficientes los procedimientos de saneamiento e identificación de casos.
Así, y en línea con las recomendaciones internacionales de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) y la Comisión Internacional de Trichinellosis (ICT), el Senasa realizó una actualización normativa e incorporó cambios en el proceso de envío faena de los animales ante la detección de un brote, contemplando variantes para el manejo de la enfermedad, según las condiciones sanitarias, higiénicas y productivas de cada establecimiento en particular.
La norma estimula la coordinación de tareas entre el Senasa y organismos provinciales y municipales competentes durante la totalidad del procedimiento operativo para la contención de la enfermedad, a los fines de fortalecer el sistema de vigilancia y el monitoreo de esta zoonosis.
En este marco, además de la técnica de Digestión Artificial (DA) como método oficial para el diagnóstico de la enfermedad para carnes de consumo, a través de la nueva resolución se suma la técnica de ensayo por inmunoabsorción ligado a enzimas (ELISA) que detecta anticuerpos específicos contra las larvas de Trichinella spp.
Por otro lado, se incorpora un sistema de autocontrol, donde los establecimientos faenadores de porcinos habilitados por el Senasa deberán asegurar el diagnóstico de Trichinella spp. mediante la técnica analítica que establezca el Organismo sanitario.
QUÉ ES LA TRIQUINOSIS Y CÓMO PREVENIRLA
La triquinosis o trichinellosis es una enfermedad parasitaria endémica, causada por las larvas de nematodes del género Trichinella spp. que afectan al ser humano, mamíferos domésticos, silvestres, aves y reptiles.
Se trata de una zoonosis que puede transmitirse a las personas por el consumo de carne o derivados cárnicos que contienen larvas del parásito. En Argentina, la principal fuente de infección para las personas es el consumo de la carne de cerdo y/o productos derivados.
Con respecto a los cerdos domésticos, la parasitosis está relacionada a las condiciones de crianza y alimentación, y a la presencia de animales sinantrópicos (por ejemplo, ratas) en el criadero o en basurales cercanos.
Este parásito puede encontrarse en la musculatura de un amplio rango de mamíferos –especialmente carnívoros y carroñeros–, aunque también existen especies de Trichinella spp. que parasitan a aves y reptiles.
Cabe recordar que la triquinosis es una enfermedad de notificación obligatoria establecida por normativa oficial y que cualquier persona puede dar aviso de una sospecha de la enfermedad al Senasa a través de los siguientes canales:
En la oficina del Organismo más cercana – personalmente; por Whatsapp al 11 5700 5704; escribiendo un correo electrónico a notificaciones@senasa.gob.ar; y a través del apartado Avisá al Senasa, disponible en el sitio web oficial.
“La actuación inmediata minimiza las consecuencias, optimiza la intervención y posibilita el control de enfermedades antes de que se diseminen”, recordaron desde el Senasa.