Los productores entrerrianos recordarán a la campaña de soja 2017/18 por las escasas lluvias, los bajos rindes y las deudas pendientes de pago.
Desde el momento en que el agricultor toma la decisión de sembrar debe afrontar una serie de gastos, lo cual representa su inversión.
Estos gastos contemplan:
– Labores (siembra y pulverizaciones)
– Compra de insumos (semillas, fertilizantes, insecticidas y fungicidas)
– Gastos de cosecha y comercialización.
Para el caso de la soja, la inversión puede expresarse en kilogramos/hectárea, lo que se denomina habitualmente el rendimiento de indiferencia. En otras palabras, el rendimiento de indiferencia es la cantidad de kilogramos/hectárea que debe alcanzar el productor para recuperar la inversión realizada.
Como hace varios años, se elaboró el informe económico de la cosecha de soja realizado en conjunto por la Bolsa de Cereales de Entre Ríos y la EEA INTA Paraná, el cual emplea los rendimientos promedios obtenidos, datos de precios y comercialización aportados por la red de colaboradores.
Los resultados se analizan para las cuatro zonas en las que se encuentra dividida la provincia de Entre Ríos:
• Norte (departamentos Villaguay, Federal, Feliciano y La Paz)
• Este (departamentos Federación, Concordia, San Salvador y Colón)
• Oeste (departamentos Paraná, Diamante, Victoria y Nogoyá)
• Sur (departamentos Tala, Uruguay, Gualeguay y Gualeguaychú)
Detalle para la soja de primera:
Los productores de la zona Este obtuvieron rendimientos promedios de 600 kg/ha donde el productor para hacer frente a los todos los gastos incurridos, incluyendo el arrendamiento, necesitó 1.460 kg/ha, lo que arroja un margen negativo de 860 kg/ha.
Mientras que, sin arrendamiento, los kilogramos necesarios para cubrir los costos son 820 kg/ha rinde que tampoco fue logrado, donde se produjeron perdidas en torno a los 290 kg/ha promedio.
En la zona Oeste el rinde promedio obtenido fue de 1.190 kg/ha, necesitando el productor cosechar 1.780 kg/ha para cubrir el total de los gastos pagando alquiler. En tanto que, el productor en campo propio el reporte arroja 900 kg/ha. Para la cobertura de costos. Por lo tanto, en campo propio el resultado fue positivo versus al productor que alquilo, quien no lograría cubrirlos.
En tanto para la zona Sur, fueron necesarias 1.820 kg/ha para cubrir todos los gastos incluyendo el arrendamiento, en tanto sin arrendar se requirieron 930 kg/ha. El rendimiento promedio obtenido en la presente campaña fue de 1.160 kg/ha. En consecuencia, el margen positivo fue muy ajustado en campo propio, mientras que en campo arrendado tuvieron perdidas aproximadas a los 660 kg/ha.
Por último, para la zona Norte con un rinde promedio de 810 kg/ha. Si se incorpora el gasto de arrendamiento, fue necesario obtener 1.390 kg/ha para cubrir todos los gastos, con lo cual se produjeron perdidas en torno a los 580 kg/ha. En campo propio se necesitaron obtener 820 kg/ha. Teniendo una mínima perdida pero generando margen negativo para esta modalidad.
Con estos datos expuestos podemos concluir que en la provincia de Entre Ríos los productores de la zona Norte y Este que sembraron soja de primera, no lograron cubrir los costos de dicha producción, obteniendo como resultado perdidas.
En la zona Oeste y Sur en campos arrendados los márgenes resultaron negativos. Únicamente en campo propios de la zona Oeste y Sur los márgenes de la soja de primera alcanzaron un margen positivo.
Detalle para la soja de segunda:
El resultado por zona para la soja de segunda, fue negativo para todas las zonas y modalidades de siembra.
La zona con mayor perdidas en kilogramos por hecatera es la Norte en campo arrendado, la cual se sitúa entorno a los 670 kg/ha, en segundo lugar de importancia se ubicó la zona Oeste con 630 kg/ha.
Solamente los productores que sembraron en campo propio al Sur de la provincia fueron quienes tuvieron las menores perdidas registradas (alrededor de 20 Kg/ha).
Conclusión:
Si se realiza un promedio ponderado a nivel provincial, los productores que arrendaron tuvieron perdidas en torno a los 600 kg/ha y en campo propio el valor se ubicó en 100 kg/ha.
(Bolsa de cereales)