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Huracán de Tres Arroyos tuvo una excursión efímera por Primera División y la página Solo Ascenso recordó los mejores momentos de ese paso.

 

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El 30 de junio de 2004 se empezaría a escribir una de las páginas más gloriosas de Huracán de Tres Arroyos: el equipo dirigido por aquel entonces por Eduardo Chavo Anzarda lograría imponerse en la ida de la Promoción ante Atlético Rafaela por 2-1, con goles de Claudio García y Ezequiel Miralles.

 

 

El Globo de Tres Arroyos disputó la Primera B Nacional con muy buenos rendimientos y resultados. En el Apertura, Rodrigo Palacio era la figura estelar, pero luego emigraría a Banfield. En el Clausura, con la misma base integrada por Jorge Izquierdo, Milton Pardal, Iván Dragojevich, entre otros, Huracán llegaría a una instancia final para lograr el sueño de ascender a la Primera División.

 

 

Con la ventaja de la ida, quedaba definir el pleito en el Nuevo Monumental de Rafaela. Allí aparecería el Chopi Izquierdo, que con su pegada convertiría dos golazos inolvidables de tiro libre para cristalizar ese anhelo de subir de categoría.

 

 

El debut en Primera División sería en la vieja cancha de Estudiantes de La Plata, ante el equipo dirigido por Mostaza Merlo. El local, con gol de Mariano Pavone, se puso en ventaja y sobre el final, Cristian Galván cruzaría su remate para el delirio de los hinchas que viajaron hasta la ciudad de las diagonales.

 

 

Al plantel que obtuvo el salto de categoría se incorporaron varios jugadores. El refuerzo más rutilante fue el delantero Jeremías Caggiano, surgido de Independiente, que a base de goles aletargó lo que iba a ser el inevitable descenso tras ganar solo dos partidos en toda la temporada.

 

 

En el caso de Martín, vale recordar que su primer equipo fue Unión de Santa Fe, donde debutó en el año 1999. Permaneció en el club hasta 2004, integrando el plantel que descendió a la Primera B Nacional en 2003. Con el equipo en la segunda división del fútbol argentino, se erigió como una de las piezas claves para mantener la categoría, sobre todo en los partidos de promoción ante Tristán Suárez.

 

 

Esto fue lo que hizo que Eduardo Anzarda lo pidiera para que integre el plantel de Huracán de Tres Arroyos, que había obtenido el ascenso a la Primera División. Unión lo cedió a préstamo por un año, tiempo en el cual Huracán de Tres Arroyos se mantuvo en Primera. Finalizado el préstamo, fue cedido nuevamente en esta condición a Mineros de Venezuela por seis meses, club con el cual disputó la Copa Sudamericana, quedando eliminado en primera fase.

 

 

El 26 de septiembre de 2004, en el marco de la octava fecha, Huracán conseguía su primera victoria en el clásico regional ante Olimpo de Bahía Blanca. El partido disputado en el José María Minella de Mar del Plata tendría como figura otra vez al enganche Izquierdo, marcando un doblete que le daría la primera alegría al Globo de Tres Arroyos.

 

 

En la siguiente fecha sería el turno de visitar La Bombonera. A pesar de las diferencias lógicas de jerarquía, los tresarroyenses comenzaron ganando con gol de Gabriel González, a los 4 minutos de la etapa inicial. Finalmente, tras dilapidar algunas chances de peligro, Martín Palermo en dos oportunidades le daría el golpe final para el 2-1 definitivo en favor del Xeneize.

 

 

El último triunfo en Primera, a falta de una ronda entera más a disputar, fue contra Argentinos Juniors, el 28 de noviembre, por 3-1, con un doblete de Jeremías Caggiano y el restante del crespense Martín Zapata, para darle una alegría a los dirigidos por Pablo Morant, que suplantó a Anzarda en el banco.

 

 

Con la urgencia imperiosa de sumar puntos para salvar la perdida de la categoría, Huracán se reforzaría con dos jugadores de experiencia: Martín Mandra y Leonel Gancedo, que llegó al club tras seis meses de inactividad.

 

 

A pesar de los intentos reiterados, el Globo padeció en el Torneo Clausura la divisional y tan es así que no ganó un solo partido: empató 5 y perdió 14. Como dato de color, en esta etapa del certamen pudo estrenar su remodelado estadio Roberto Bottino, donde recibió las visitas de Boca, Racing, Independiente y San Lorenzo.

 

 

Su último partido en el Monumental, con derrota por 1-0 ante River, fue la despedida y comenzaría a ser el principio de una caída que lo alejaría de los primeros planos hasta la actualidad, donde milita en el Torneo Federal C.

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