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El Juzgado Federal de Corrientes 2 resolvió cómo se realizará el procedimiento de toma de muestras en la Avícola Santa Ana S.A, que sería la tercera en llevarse a cabo para comprobar la salud de las aves afectadas por la sospecha de gripe aviar en la empresa. Por su parte el Senasa negó haber ordenado a la empresa la destrucción de miles de docenas de huevos
Se autorizó a la firma a realizar la toma de muestras al mismo tiempo que lo haga el Senasa y a disponer de las diligencias necesarias para el control de estas.
Sin embargo, en cuanto a la cantidad de profesionales a intervenir el procedimiento, determinó que corresponde al ámbito de atribuciones exclusivas de la autoridad sanitaria y dado el carácter científico de la materia en cuestión, corresponde autorizar al Estado Nacional a intervenir con la cantidad de expertos que juzgue necesarios.
Se recomendó a Senasa y a la empresa Avícola Santa Ana S.A «que realicen el máximo esfuerzo en disponer medidas de seguridad y prevención que impidan la propagación del virus, todo ello, en protección de la Salud Pública y la industria avícola».
La avícola correntina Santa Ana tiró a la basura unos 360.000 huevos por un valor de $ 7 millones pese a que el test de gripe aviar que se hizo en segunda instancia dio negativo. Y desde la empresa culparon al Senasa de la situación y de no dejarlos donar.
Daniel Encizo, Director General de Avícola Santa Ana, había dicho que tuvieron que tirar los huevos porque el Senasa les prohibió el movimiento de la producción «Los huevos no constituyen ningún peligro para la salud pública, incluso, de aves infectadas», apuntó.
Al respecto, el organismo sanitario aclaró que en ningún momento ordenó la destrucción de huevos almacenados en dicha granja y que fue una decisión unilateral de la empresa. Asimismo, sin perjuicio de ello, se está trabajando para ofrecer alternativas de acopio o tratamiento térmico.
Según el Senasa, la medida fue solicitada el viernes pasado y va en línea con las medidas de precaución adoptadas por el Plan de Contingencia para evitar la difusión del virus tras el primer diagnóstico positivo en la citada granja.
Vale destacar que una segunda muestra tomada a aves de la granja Santa Ana, dispuesta por orden de la Justicia Federal, dio resultado negativo según diagnosticó el Laboratorio Nacional del Senasa.
La avícola denunció en primera instancia el test realizado por el Senasa, que según el organismo había sido positivo, lo que obligaba a Santa Ana a que se sacrificaran las 200.000 gallinas que tienen en producción.
Por lo que desde la firma se presentaron ante la Justicia, para pedir «que se realicen las muestras correspondientes y se frene así la decisión tomada de manera tan arbitraria y desastrosa».
Ante este pedido, el Poder Judicial de la Nación, a través del Juzgado Federal de Primera Instancia de Corrientes, aprobó el recurso de amparo presentado por la avícola y dispuso un plazo de 24 horas desde el dictamen del fallo para que Senasa presentara las pruebas que sustenten la medida de “rifle sanitario».
Así, según informó el mismo Senasa este viernes, la segunda muestra tomada a aves de la granja, dispuesta por orden de la Justicia Federal, dio resultado negativo a la presencia de gripe aviar.
Y ahora el Senasa fue autorizado por el Juez Federal interviniente a tomar una tercera muestra en aves de la granja Santa Ana para determinar su situación epidemiológica respecto de influenza aviar (IA) mediante el desarrollo de técnicas tanto moleculares (RT- PCR) como serológicas.
