La zona rural limítrofe entre Santa Fe y Córdoba sigue siendo víctima de inseguridad. “En los últimos meses se agravó bastante”, dijo productor afectado y afirmó: «cuando te faenan 6 animales hay un circuito de comercialización detrás».
La zona limítrofe entre Santa Fe y Córdoba sigue escribiendo capítulos de una inseguridad que crece, y que agrega ribetes preocupantes.
En esta oportunidad, la víctima fue el establecimiento «Don Pedro», un tambo radicado en Josefina, propiedad de la familia Pozzi de San Francisco. Fue en la madrugada del pasado martes, cuando amanecieron como testigos de una horrible postal: 6 vacas de tambo faenadas en el piso.
El hecho ocurrió, pese a que el lugar tiene guardias armados. Es que ante el aumento de casos de inseguridad han implementado medidas de seguridad, como cámaras de vigilancia, perros de guardia y personal armado.
Sin embargo, es tal el volumen del delito y la impunidad con que se mueven, que la situación ha cambiado poco o nada. Así lo confirmó con impotencia Francisco Pozzi, dueño del establecimiento, quien expresó su profunda preocupación.
«Hay barrios complicados que tenemos de vecinos, donde operan los delincuentes, que hicieron que cerraran algunos establecimientos», dijo y dio cuenta que “la gente ya no quiere vivir más en el campo por la inseguridad, y nosotros estamos en primera línea. Esto viene pasando hace mucho tiempo, pero en los últimos meses se agravó bastante”.
Consultado sobre los delitos más frecuentes, explicó que en la región lo más común es el abigeato y la faena de animales de tambo. «Después o durante una tormenta; de noche, sin visibilidad, van cortando los alambres, les cortan los garrones a los animales, los llevan hasta el barrio y ahí los faenan».
Pero eso no queda ahí. Cortan los caños de los molinos para vender el cobre, y todo tipo de delitos contra la propiedad.
“Hay una falta de control muy grande. Hace 20 años que hacemos reuniones con las autoridades, quienes nos comentaron que tuvieron que llevar gente a Rosario y que iban a pedir saturar la zona, porque entienden que es una zona caliente de la provincia, expresó.
Pero Pozzi remarca que la Guarda Rural «Los Pumas» nunca tuvo los recursos para patrullar. «Una vez un policía me dijo que estaba solo, y que si iba al campo le robaban el destacamento. Hoy está cambiando, pero históricamente ha sido muy escaso el recurso».
Y sostuvo que todos los vecinos están en la misma situación, «estamos en un grupo donde nos informamos, y todas las noches algún evento ocurre: hay gente que vive en el campo que no sale de la casa, y los delincuentes se manejan con mucha impunidad».
Red delictual
El empresario además manifiesta que «cuando te faenan 6 animales hay un circuito de comercialización detrás. Ya encontraron en operativos carne sin sellos, pero hay un problema judicial. La Sociedad Rural de San Francisco hizo reuniones con fiscales para poder allanar, pero te despostan el animal en el momento y es difícil atraparlos».
Vacas y armas
Finalmente, Pozzi detalló un tema que despierta más incertidumbre. «Tenemos policías retirados patrullando, y la gente que vive en el campo está armada por una cuestión de seguridad personal, aunque frente a cualquier evento tratan de no salir afuera, la gente tiene miedo».
El tambo sufre este problema, inclusive hubo 2 o 3 tambos chiquitos que tuvieron que cerrar. (Cadena3)