“La primera cuota deberá pagarse en mayo y el aumento oscilará entre el 150 y 160%”, confirmó el vicepresidente de FAA a Elonce. Guía también se refirió a la Reforma Tributaria y a la brecha de precios entre el campo y la góndola.
El vicepresidente de Federación Agraria Argentina (FAA), Elvio Guía, confirmó a Elonce que el aumento del Impuesto Inmobiliario Rural “oscilará entre el 150 y 160%”. Así quedó establecido tras la reunión que mantuvieron dirigente de la Mesa de Enlace con miembros del gabinete de Rogelio Frigerio.
“La primera cuota deberá pagarse en mayo, es decir, un mes después de lo que estamos acostumbrados a pagar; y el aumento oscilará entre el 150 y 160% que, si bien no es lo ideal, está por debajo del nivel inflación y no costaría más kilos de lo que se pagó el año pasado por hectárea”, comunicó el dirigente ruralista y aclaró que “el tope será del 190% porque año tras año hay partidas que se disparan por encima de lo que se pacta con el gobierno”.
Otro tema que trataron los referentes del campo con los funcionarios provinciales fue el impuesto de Ingresos Brutos. “Hay una base imponible de pequeños y medianos productores que no lo estaban pagando y no queremos que los empiecen a gravar porque es un impuesto distorsivo, y no es justo”, indicó Guía.
Reforma Tributaria
Además, se plantearon algunos puntos de la reforma del código fiscal y la ley impositiva que trata la Legislatura entrerriana. “Está previsto un descuento para el buen pagador, que son los de pequeños y medianos productores, porque hay una idiosincrasia respecto de pagar Impuesto Inmobiliario Rural todo junto”, analizó el referente de FAA, pero acotó que tales especificaciones aún no están establecidas.
“El Impuesto Inmobiliario Rural, a voluntad del Ejecutivo provincial, podría tener actualizaciones por inflación de acá hasta fin de año, en las cuatro cuotas en las que se paga; por eso nos negamos, no por capricho, sino porque caen los precios internacionales de commodities, que no tienen nada que ver con la inflación”, fundamentó el dirigente del campo. Y amplió: “Hubo tres meses de inflación muy fuerte en Argentina, mientras que cayó el precio internacional de la soja y aumentaron los precios de los combustibles, los impuestos y el salario, con los cual, el resultado queda lejos de la actualización de la inflación y se pierde plata”.
Cabe aclarar que, a la fecha, el tema tributario está regido a través de la ley mapa-suelo que en los ´90 estableció 36 zonas agroecológicas las que, de acuerdo a la productividad del campo, tenían un valor X y de ello, el promedio de los últimos cinco años, era el valor del Impuesto Inmobiliario que se ocupaba. “El impuesto es progresivo porque está vinculado a la cantidad de hectáreas y de partidas, lo que hace que el productor más chico, pague menos y el que tiene más, pague más”, especificó Guía.
“El del tambero es un problema que no hemos podido solucionar con ningún gobierno porque no hay ni voluntad ni de parte de los empresarios lácteos y supermercadistas, ni de parte del gobierno para mirar cuál es el problema en la cadena de producción, porque si uno paga 1.300 pesos un litro de leche, pero el productor cobra poco más de 200 pesos en boca de tambo, evidentemente, hay un problema y alguien se está llevando una tajada. No es el productor y al que se esquilma es al trabajador asalariado”, expuso Guía.
Y continuó: “Es una situación que pasa con otros productos lácteos, como los quesos y los yogures, cuyos precios no paran de subir en las góndolas “.
“El productor produce leche y cobra en pesos, pero la vaca come en dólares porque los insumos se pagan a valor dólar”, indicó y cuestionó que “Hay un abuso que no solo paga el productor, sino también lo paga el consumidor”.
El Gobierno anunció la apertura de importaciones de alimentos
“El Gobierno nacional dispuso la apertura de importaciones para bajar el precio de estos productos, pero el problema no está en el productor, porque cobra hasta 15 menos de lo que cobra un supermercadista”, apuntó y avizoró que “la apertura de importaciones traerá muchos problemas en la producción de cerdos y frutas de carozo y pepita”.
“Más allá de la presión tributaria, que es del 65% en la Provincia -y es una de las más altas del país-, al 90% se lo lleva el Gobierno nacional a través de ganancias y demás impuestos”, disparó y Guía y remató que “la gente y el sector productivo ya no aguantan el seguir pagando este ajuste”. (Elonce)