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Ya no son siete. Se han sumado por lo menos dos más en las últimas horas». La información, aportada por uno de los profesionales de la salud del Hospital Masvernat de Concordia, actualiza el número de objetores de conciencia que el director del nosocomio, el Dr. Miguel Ragone, confirma
Las notificaciones formales, por escrito, firmadas por los médicos que han decidido nunca más intervenir en la práctica de un aborto, no son los únicos papeles que han llegado recientemente al despacho de Ragone. También, desde Paraná, arribó una comunicación oficial del inicio de sumarios administrativos por presunta «violación al secreto profesional».
El «bozal» a quienes se habían atrevido a describir lo sucedido en el Masvernat, tiene por objeto impedir que esas voces contradigan la estrategia seguida por el Ministerio de Salud de Entre Ríos, que en vez de anunciar el inicio de una investigación a fondo que arrojara certezas, optó por la inmediata negación.
En contraste con el silencio impuesto a los médicos, este martes fue el abogado de la familia de la menor a quien se le practicara el aborto, Pedro De La Madrid, quien publicitó en los medios una carta documento dirigida al Obispo de Concordia, Monseñor Luis Armando Collazuol, en la que alude a la presunta «historia clínica», brinda detalles de cómo supuestamente habría sido el procedimiento seguido para la interrupción del embarazo y la colocación del feto en «un frasco con formol» y llega al extremo de asegurar que la menor habría intentado «en dos oportunidades quitarse la vida», revelaciones que distan de contribuir a atenuar la «exposición pública» y la «revictimización».
Con independencia de los dichos del letrado, un informe de los profesionales del COPNAF responsables de brindar contención a la menor sería la documentación requerida desde los tribunales para conocer la real situación de la adolescente. Mientras tanto, amparándose en el presunto estado psíquico de su defendida, el abogado ha demorado la realización de la Cámara Gesell, procedimiento clave para procurar determinar si fue una violación la causa del embarazo que fuera interrumpido cuando ya transitaba el quinto mes.
«No tengo problemas en ir a tribunales y contar lo que escuché«
Se desconoce si la Justicia llamará a declarar a la veintena de funcionarios públicos que participaron de la reunión en la que los médicos y directivos del Hospital Masvernat revelaron la sobrevida del bebé abortado e incluso cuantificaron las horas. El encuentro fue en la tarde del martes 4 de diciembre, en la sede de la Asociación de Magistrados y Funcionarios Judiciales.
El Entre Ríos estableció contacto con uno de los profesionales para saber si, en el caso de que así se lo requirieran, estaba dispuesto a testimoniar lo escuchado. «Por supuesto que sí. No tengo problemas en ir a tribunales y contar lo que dijeron los médicos. Además, éramos muchos y todos escuchamos lo mismo», respondió, tras recordar el impacto que le causara cuando la representación del Hospital Masvernat, presente en aquella reunión, reveló la sobrevida de «10 horas».
