A pesar de que la Argentina se autoexcluyó del comercio exterior a raíz de la enfermedad, acordó con esos países que los envíos provengan de zonas libres de ella. También se podrán continuar con los envíos de productos termosellados.
Tras la detección de gripe aviar por primera vez en el país el 28 de febrero en aves de corral para comercialización y que llevó a que Argentina autosuspendiera sus exportaciones tanto de carne como de huevos, se alcanzaron acuerdos para retomar los envíos a Rusia y Hong Kong de carne fresca aviar de zonas libres de la enfermedad y, por otro lado, continuar con los despachos de productos termosellados.
Así lo indicaron desde el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), organismo que no solamente lleva a cabo la lucha contra la enfermedad, sino que también se encarga, junto a Cancillería, de las negociaciones para la reapertura de los mercados internacionales.
“Recientemente, el Senasa logró acuerdos para continuar las exportaciones, que excluyen las áreas afectadas por Influenza Aviar. Este es el caso de Hong Kong y Rusia”, dijeron fuentes del organismo público, mientras que en lo que respecta a los despachos de productos que cuenten con un tratamiento térmico, como la carne aviar termoprocesada, huevo en polvo o pasteurizado, siendo que este tratamiento inactiva el virus de IAAP, se logró que “estos productos pueden ser exportados con los mismos certificados sanitarios de exportación”.
Tanto Rusia como Hong Kong no aparecen entre los diez principales mercados de exportación, que son China, Chile, Sudáfrica y Arabia Saudita, países con los que también se iniciaron gestiones, publicó Infobae. Para dar una proporción, el mercado chino compró 270.000 toneladas de carne aviar entre 2020 y 2022 mientras que Rusia importó 10.000 toneladas. Más allá de eso, la clave está en que se pudieron reabrir mercados tras la autoexclusión que hizo la Argentina ante los primeros casos, tal como dispone la normativa comercial internacional.
Gran parte del trabajo que está llevando a cabo el Senasa, en conjunto con la Cancillería, es “entablar contacto con los socios comerciales, con quienes se mantienen negociaciones abiertas para lograr nuevos certificados de exportación”, ya que el país perdió la condición de país libre de la enfermedad. “Trabajamos para poder negociar nuevos certificados con los países compradores y así destrabar lo que son exportaciones de carne aviar y huevo a través de certificaciones de otra índole, como por ejemplo decir que las aves provienen de una zona que no ha tenido casos de Influenza Aviar. Es una forma más ágil de avanzar”, indicaron desde el Senasa.
Asimismo, informaron que se está trabajando en las negociaciones sanitarias para restituir las exportaciones de genética aviar a países del Mercosur y México, en cumplimiento de las recomendaciones internacionales para los intercambios de estas mercancías, mientras que en esa la misma dirección, entre el 19 y el 22 de abril el Senasa participará de un encuentro que organiza la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) en México con todos los países americanos para “hacer una evaluación sobre las distintas herramientas de lucha contra esta enfermedad, entre ellas la vacuna, y su impacto en el comercio, un preámbulo de lo que ocurrirá en mayo en la OMSA con todos sus miembros, en París”.
Las empresas
Por su parte, el Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA) informaron días atrás que se cambiaron todos los certificados, ya que los anteriores decían que los productos o las aves dentro del contenedor provenían de un país libre de influenza aviar. “Como nosotros ya no somos más libres de influenza aviar tenemos que poner que las aves vinculadas al contenido de este contenedor provienen de una granja que, en los últimos 30 días o 60 días, no ha tenido en un radio de 10 o de 15 kilómetros ningún caso positivo”, expresó el referente de la actividad avícola.
Además, se informó que estas modificaciones en los certificados son un primer paso, ya que el país importador debe aprobar las nuevas condiciones y, para eso, solicitará un plan de trabajo y vigilancia que conduzca al control y erradicación de la enfermedad. Donde deben comenzar otro tipo de gestiones tanto públicas como privadas. Factores que a juicio de CEPA demandan una nueva organización por parte de las empresas debido a que perdieron mucha mercadería en stock hasta que se libere este contexto.
Según informaron desde el Senasa, hasta el momento hay 59 casos positivos de gripe aviar en la Argentina. Además, por el ingreso de la enfermedad al circuito comercial, se sacrificaron 700.000 aves, de las cuales el 30% fue por la enfermedad y el resto por tener un vínculo estrecho con la misma. Según dijeron desde la producción, la cifra de aves muertas no llega al 2% del total de aves comerciales.