El refuerzo de los operativos de seguridad en las calles por parte de la Policía en Paraná, descubrió una situación que se está investigando judicialmente, pero que tiene serias sospechas de la existencia de una organización que lucra confeccionando carnets truchos de la Municipalidad de Paraná.
Lo que se trata de establecer es si los responsables de la ejecución de las maniobras de confección de las licencias oficiales tienen relación o no con el Estado municipal.
Desde la División Seguridad Urbana y Bancaria de la Policía de Entre Ríos se confirmó a UNO que en las últimas semanas se diagramaron nuevos operativos de control en distintas partes de la ciudad, a fin de neutralizar denuncias por hechos de inseguridad. Lo que le llamó la atención a los uniformados pertenecientes a la Dirección de Operaciones es que fueron detectados como mínimo 25 conductores de vehículos o motos con carnets apócrifos, todos de la ciudad de Paraná.
El jefe de la División, Mariano Martín explicó: «a causa del trabajo en la calle, con procedimientos en distintos horarios y sectores, se descubrió una particularidad, que inmediatamente fue informada a las autoridades judiciales en turno. Se descubrieron al menos 25 carnets que no eran auténticos, por lo que se elevaron las denuncias a las fiscalías correspondientes para que profundice una investigación y se determinen los responsables».
El responsable de Seguridad Bancaria explicó que no solo hay una violación a la Ley de Seguridad Vial, sino también hay aspecto penales que se estarían configurando como delitos. «En los procedimientos, se notificó a los conductores que en este tipo de maniobras de emisión de carnets truchos, será sancionada la persona que emita la licencia apócrifa, como aquel que participe de la maniobra pagando una determinada suma de dinero, para obtener una credencial no válida», recalcó Martín.
Recordó el funcionario policial que en la primaria investigación se supo que los conductores que avanzaron con estas ilegalidades se contactaron con las personas que ofrecían los carnet truchos a través de las redes sociales, en tanto que se hacían los pagos de entre 20.000 a 3000 pesos en efectivo, a través de los sistema electrónicos de billeteras virtuales. «Se obtuvieron datos de los participes necesarios iniciales, que una vez que se hacía el pago virtual, se le enviaba el carnet trucho al domicilio indicado a través de motomandados», detalló sobre los delitos detectados, al tiempo que aclaró: «Hasta el momento no nos consta que exista conexión con alguna dependencia o empleados municipales”.
Por este problema detectado en las calles de Paraná la Policía se reunió con autoridades de las áreas competentes de la Municipalidad. «Los funcionarios de la Comuna tomaron esta problemática e iniciaron investigaciones internas para deslindar responsabilidades», comentó.
Hizo notar Martín que en los operativos de seguridad vehicular se comprobó que los carnets truchos «eran muy diferente a uno oficial de la Municipalidad”.
La compactación
Otro aspecto que provocó inconvenientes con la nueva forma de ejecutar los operativos de seguridad vial en las calles por parte de la Policía, es que ya no hay lugar para almacenar las motos secuestradas. «En los controles se detectan infracciones y faltas graves, que determinan el secuestro del motorodado, y su posterior traslado a las instalaciones de la Policía en Bajada Grande. El problema que tenemos desde hace un tiempo, es la acumulación de las motos, quedando muy poco espacio para ocupar», comentó para indicar: «Las autoridades de la Policía de Entre Ríos están tratando de impulsar el proceso de compactación a corto plazo».
Hoy se cuenta con más de 7.000 motocicletas almacenadas en el depósito de Bajada Grande, muchas de las cuales se encuentran desde hace años.
Martín enfatizó que los operativos de prevención, se ajustaron con más móviles y uniformados en varios puntos móviles de la ciudad, con el fin de buscar la prevención del delito y evitar accidentes de tránsitos, además, se intensificaron los operativos nocturnos de control de remises y colectivos para dar mayor tranquilidad a los pasajeros».
Zonas calientes
En la ciudad de Oro Verde, como el sector sur de Paraná, en San Benito y el oeste de la capital, a través del mapa del delito, se verificó un aumento de los hechos de inseguridad. En los incidentes, los vecinos denunciaron arrebatos y robos. Esto llevó a que se diagramaran nuevos operativos rotativos con distintos medios y policías.
Según los primeros resultados del trabajo conjunto de la Departamental de Policía de Paraná, las comisarías y la Dirección de Operaciones, se logró en pocas semanas detener un alto número de sospechosos que fueron puestos a disposición de la Justicia.
Los vecinos reclamaron dialogaron con las autoridades policiales, y tras los encuentros con los jefes se acordó este tipo de procedimientos, más otras serie de acciones para mejorar la seguridad tanto en las calles como en las propiedades.