Dejar enchufados artefactos eléctricos sin uso en modo «dormido» puede representar hasta el 16% de la factura. Algunos consejos que los usuarios deberán tener en cuenta para cuidar el bolsillo.
El cargador de celular enchufado, pero no conectado al dispositivo, es uno de los ejemplos mas claros y actuales. De eso se trata cuando hablamos en torno al «consumo vampiro» o «stand-by» , el causado por los aparatos eléctricos que permanecen enchufados sin uso en modo «dormido» o «estado de espera» pero que siguen consumiendo servicio.
Según datos oficiales de la Cámara Argentina de Industrias Electrónicas, Electromecánicas y Luminotécnicas (CADIEEL) representa entre el 5 y el 16 por ciento del consumo general del hogar.
Por tal motivo, los usuarios del servicio deberán tener en cuenta esta situación si el objetivo es poder reducir el precio que llega en la boleta y así cuidar el bolsillo.
El «consumo vampiro» de electricidad se da por los artefactos que consumen energía eléctrica todo el día, aún cuando están apagados. Si no los desenchufás, el pago por el servicio será cada vez más costoso.
El consumo oculto de los «vampiros eléctricos» se debe normalmente a un dispositivo conocido como «stand by», que sirve al electrodoméstico para encenderse más deprisa, detectar un mando a distancia en cualquier momento o realizar algún tipo de orden programada.
En otras ocasiones, los aparatos vienen provistos de relojes, luces o paneles informativos digitales que están activados constantemente, y que, por tanto, necesitan también electricidad.
«La población debe pensar con el bolsillo pero también cuidando los recursos no renovables», argumenta Luciano Paulín, Director de Análisis Normativos del EPRE (Ente Provincial Regulador de la Energía de Entre Ríos) a la hora de analizar esta temática de actualidad.
«Todos debemos acostumbrarnos que a antes de ir a dormir habrá que desenchufar los artefactos que no usemos: televisor, microondas, cargadores, computadoras, etc… «, agregó Paulin. Será la nueva forma entonces de poder reducir el consumo para que luego la boleta no «duela tanto».