El INTI participa de una iniciativa internacional para enriquecer distintos productos lácteos con la incorporación de selenio en la alimentación de las vacas lecheras.
La iniciativa fue diseñada para investigar el enriquecimiento de distintos productos lácteos a través de la incorporación de selenio en la alimentación de las vacas lecheras. Se trata de un mineral que aporta propiedades funcionales y, por tanto, beneficios a la salud, en términos nutricionales.
El rol del INTI en esta colaboración internacional consiste en estudiar la tecno-funcionalidad de la leche y los productos lácteos, que involucra mediciones analíticas, elaboración de productos, evaluación sensorial y desarrollo de protocolos para el proceso, explican desde el organismo.
Leandro Aguilar y Marcelo González, investigadores del INTI, viajaron a Barcelona para profundizar actividades en lo que respecta a elaboración de productos lácteos.
«Dentro del recorrido realizado, parte del trabajo reciente se dio de forma conjunta con el INTA, e implicó el enriquecimiento, con selenio, de lotes de alfalfa, alimento de las vacas. Mediante distintas técnicas -spray y liofilización- se avanzó en el secado de la leche obtenida, que luego, ya en polvo, se exportó a Barcelona. Allá se avanzó en la elaboración de quesos y yogures y se tomaron muestras para hacer análisis de composición, funcionalidad y calidad del producto, que se almacenó bajo condiciones de congelación», comenta Marcelo González.
González explica que la tecnofuncionalidad se refiere a «la aptitud que tienen la leche y el producto en virtud de aquello que se busca alcanzar. Y se estudia a partir de análisis fisicoquímicos, reológicos y microbiológicos. En este caso, queremos indagar sobre la funcionalidad del selenio; saber cuánto y cómo se encuentra ese elemento en la leche y en cada producto, y en cuáles aparece en mayor proporción y disponibilidad.
«Analizamos no sólo muestras de alfalfa biofortificada con selenio, sino también productos lácteos elaborados con leche fortificada, obtenidos de vacas alimentadas especialmente a ese fin. Mediante una técnica analítica puntual, se pueden obtener espectros de rayos X de fluorescencia, que luego se normalizan para comprender la distribución de diferentes especies de selenio orgánico e inorgánico en las matrices analizadas», precisa Diego.