El número dos de Vialidad avisó que necesitan 40.000 millones de pesos.
En 10.000 millones de pesos calculó el subdirector de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV), Alfredo Bel, lo derivado de la recaudación del impuesto Inmobiliario Rural que irá para el mantenimiento de caminos vecinales.
Será luego de que la Legislatura sancionara una norma que elevó al 50% el porcentaje de la recaudación del tributo que se destinara a tal fin. No obstante, admitió que no será suficiente. También volvió a mencionar los peajes en las rutas provinciales.
La Cámara de Diputados de Entre Ríos convirtió en ley la iniciativa del Poder Ejecutivo que modifica el artículo 37° de la Ley N° 9.602, para el aumento del porcentaje destinado al Fondo de Desarrollo y Conservación Vial, que pasa a constituirse con el 50% (antes era el 20%) de lo recaudado en concepto del Impuesto Inmobiliario Rural. El fondo estará administrado por la Dirección Provincial de Vialidad (DPV).
El director subadministrador de la DPV, Alfredo Bel, explicó a Radio Costa Paraná que tras este medida impulsada por el gobernador Rogelio Frigerio “a partir de este año, Vialidad tendrá el 50% de lo efectivamente recaudado del Impuesto de Inmobiliario Rural, que destinará a los caminos rurales”, pero admitió que los fondos que se recauden no alcanzarán para atender todas las necesidades en esa materia.
Esos fondos –alrededor de 10.000 millones de pesos– “con toda la voluntad y la predisposición podrían llegar a diciembre, que es cuando termina de pagarse el impuesto”, señaló Bel, y remarcó que “sólo el déficit de materiales que tenemos en broza y ripio, en los valores actuales, nos representaría una inversión de 40.000 millones”.
“Esta plata que va a empezar a llegar será asignada en un 100% a los caminos rurales prioritariamente”, confirmó Bel.
El funcionario enfatizó que el panorama “es tremendamente complicado” porque además de los caminos rurales, 19 de las 21 rutas provinciales “sí o sí hay que intervenirlas con bacheo y ahí el gobernador ha dispuesto un presupuesto para que, de a poco, empecemos a comprar materiales y tapar los pozos”.
Sabedor de las complicaciones que el mal estado de los caminos genera en la producción y en la vida social de los pueblos, dijo que “en la provincia tenemos que ir a una solución integral de este tema y nos comprometimos con (el director administrador de la DPV) Ezequiel Donda, cuando asumimos, a trabajar en esa propuesta integral”.
Distintas razones –climáticas, sobre todo–, explicó, “nos están llevando a que trabajemos siempre con la emergencia” pero “vamos a ir pensando en soluciones que sean más estables en el tiempo y que nos permitan, no tal vez a un año, pero sí de acá a 10 años, un cambio importante en el estado de nuestras rutas y caminos”.
Bel, por último, recordó que Frigerio ya ha dicho públicamente que Entre Ríos, como otras provincias –Córdoba, concretamente–, “va a ir hacia un sistema en donde parte de las obras sean sostenidas con peajes. No hay plata y la obra pública es muy cara, y por más que intentemos hacerlo con la mayor austeridad, no alcanza a recomponer el estado complejo que nos encontramos”, cerró.