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Se trata de una iniciativa público-privada entre la Municipalidad de Crespo y la empresa Schneider. Luego de seis meses de ensayo finalmente se logró fabricar un nuevo ladrillo Pet que, por sus componentes, permite una segunda vida útil. Se espera obtener la certificación del Conicet para poder producir a mayor escala
Por iniciativa del municipio y la empresa de muebles de baño Schneider SRL, surgió un nuevo ladrillo cuyos componentes son el polietilen-tereftalato (PET), como resultado de pruebas que se realizaron a lo largo de seis meses. Actualmente está en estudio para la certificación de aptitud técnica del Centro Experimental de la Vivienda Económica (CEVE –Conicet).
Al respecto, el intendente Marcelo Cerutti puntualizó que este proyecto complementa lo que ya se realiza desde hace unos años. “Vemos como positivo la integración público-privado y celebramos esta iniciativa. Esperamos que lo aprueben desde el Conicet, así aumentamos la producción de ladrillo”.
Raquel Gorostiaga, coordinadora de Educación Ambiental, explicó cómo fue el proceso de este proyecto. “Hace bastante tiempo que trabajamos con esta empresa. No particularmente con este residuo, sino con otros que nosotros los convertirlos en recursos y le damos otro valor”.
En este caso, “desde Schneider nos llegaba a la planta de tratamientos grandes cantidades de rollos PET que generaban importantes volúmenes de residuos. Con la compra de un molino triturador, la empresa nos facilitan el material molido”, contó Gorostiaga. “De ahí probamos si se podía hacer ladrillos PET como componente constructivo. Se hicieron varias mezclas con los PET Schneider y con nuestro PET”.
Por el momento, el destino final de estos ladrillos –como se viene implementando- es la construcción y restauraciones a nivel municipal, como ya sucedió con las viviendas de los abuelos.
Al respecto, la arquitecta Bettina Hofer de la Secretaría de Infraestructura y Ambiente precisó el avance de obra. De esos cuatro departamentos para adultos mayores, hay dos a los que les falta la pintura e instalación eléctrica y a los otros dos las terminaciones. “Estamos haciendo un planteo de proyecto para los cuatro años de gestión según las prioridades. Con respecto a estos ladrillos esperamos la aprobación para poder aumentar la producción y determinar su utilización”.
¿Por qué esta clase de construcción?
“Apuntamos a trabajar desde la economía circular y darle un valor agregado a los residuos que llegan a nuestra Planta de Tratamiento. Sabemos que los plásticos de un solo uso son muy contaminantes”, dijo Gorostiaga y agregó “hay otros proyectos, pero en este caso el poder reciclarlos y reutilizarlos en la construcción nos parece fundamental y valioso”.
Desde la gestión es nuestro objetivo seguir creciendo en el Parque ambiental y reciclar otros materiales. “Hoy son muchos volúmenes de residuos lo que la sociedad genera, por eso no hay que solo optar por alternativas de reciclados sino que también hay que concienciar en la reducción de la basura desde nuestros hogares y la separación en origen”, mencionó.
Para concluir, Gorostiaga dijo que “es sumamente valioso seguir apostando a la educación ambiental y trabajar con nuestras industrias y escuelas. El desafío es ir sumando al cuidado ambiental y generar valor. Lo que para algunos es basura, para nosotros es un recurso”.
«La sustentabilidad llegó para quedarse. El hecho que un objeto se recicle y vuelva al mercado de otra manera es porque diferentes actores trabajan coordinados y, sobre todo, porque tienen la misma manera de pensar sobre la importancia de una segunda vida útil de las cosas», afirmaron las funcionarias.
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