El objetivo es paliar el daño que ocasiona la plaga en el cultivo.
La Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación autorizó 22 productos fitosanitarios para el tratamiento del achaparramiento del maíz y tiene más en etapa de evaluación. La tarea ejecutada por el Senasa desde el mes de abril se lleva adelante desde el Comité de Crisis y la Mesa Técnica conformada con el sector privado para enfrentar el tratamiento de esta plaga.
El trabajo mancomunado entre un estado eficiente y el sector privado permitió la rápida evaluación de distintos productos para el tratamiento de la “chicharrita” en maíz, maíz dulce y maíz pisingallo. Esto representa no solo un acompañamiento a los productores argentinos, sino también una articulación con empresas líderes en la producción de insumos agrícolas, entre ellas Syngenta, Bayer, BASF, entre otras.
Cabe destacar que, más allá del avance en farmacología, es importante que en los distintos estadíos productivos del cultivo del maíz se sigan las recomendaciones elaboradas por la mesa técnica interdisciplinaria. Entre las recomendaciones se encuentra el control del maíz espontáneo en lotes propios y monitorear con lotes vecinos; la elección de híbridos de mejor comportamiento a la plaga; realizar tratamientos de semillas para proteger los estadíos iniciales; y, en la medida de lo posible, acortar la ventana de siembra de manera sincronizada a nivel zonal.
La novedad se conoce poco después de conocidos los resultados del quinto monitoreo sobre la presencia de la chicharrita en campos entrerrianos que llevan a cabo desde la Bolsa de Cereales e INTA. En este quinto mapa se observa que en 16 de los 18 sitios monitoreados no se registraron adultos de chicharritas del maíz. La densidad promedio fue 81% menos en comparación con el periodo anterior.
Asimismo, en los cultivos donde se realiza el monitoreo en los puntos de Victoria (cultivo de cobertura), María Grande (alfalfa) y Crespo (centeno) no se encontraron adultos de chicharritas del maíz en las cuatro últimas fechas.