La producción necesaria aumenta a 6.452,5 kilogramos de maíz por hectárea para hacer frente a la temporada.
Un productor entrerriano necesitó obtener un promedio de 5.587,5 kilos de maíz por hectárea para hacer frente a los costos en la campaña 2023/24, de acuerdo con un análisis de la Bolsa de Cereales provincial y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).
Según el estudio, quien arrienda los campos debió producir un promedio de 6.452,5 kilogramos por hectárea; y, si el terreno es propio, 4.722,5 kilos promedio.
Las entidades tomaron como referencia un precio esperado de US$ 172 por tonelada de maíz, un costo de cosecha de US$ 90, y segmentaron a la provincia en cuatro zonas: norte, sur, este y oeste.
Maíz necesario según la zona
En la zona sur, el productor necesitó cosechar 4.650 kilogramos de maíz sin arrendamiento y 6.770 con arrendamiento para alcanzar un resultado positivo; mientras que en la zona norte debió obtener 4.890 y 6.280 kilos, respectivamente.
En la zona oeste tuvo que cosechar 4.380 y 6.380 kilogramos por hectárea sin y con arrendamiento; en tanto que en el este de Entre Ríos necesitó producir 4.970 y 6.380 kilos, respectivamente.
Al momento de realizar el cálculo final, el informe tuvo en cuenta el costo medio de labores e insumos, el margen bruto por unidad de superficie, el rendimiento de indiferencia y el retorno directo por peso gastado.
Los gastos en labores e insumos (semillas, agroquímicos, fertilizantes) tomados para el cálculo del costo de implantación y protección del cultivo fueron de US$ 537 y US$ 572 por tonelada según la región.
Además, se tomaron como costos los gastos de implantación y comercialización sin impuestos, y el asesoramiento técnico y gastos de la empresa. Finalmente, para el precio de venta del maíz, se tomaron los promedios de la Cámara Arbitral de Cereales de Rosario en junio último.
UNO