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Tras el caso de la mujer a quien le amputaron la pierna equivocada en un sanatorio de provincia de Buenos Aires, hay otro caso de mala praxis sufrida por una joven de Villa Elisa. Hay otras causas por error en prácticas médicas

Madgalena Leguizamón estaba internada en el Nuevo Sanatorio Berazategui desde hacía ocho días por una infección en el pie derecho, en el cuarto dedo, que se decidió amputar al día siguiente por indicación del cirujano cardiovascular. Dado que la infección siguió avanzando, el domingo le comunicaron que debían amputar la pierna derecha. Sin embargo, en el quirófano le cortaron la izquierda.

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Tras este terrible episodio, hubo otro caso, la víctima fue la joven de 18 años, Karen Peralta, que en un control ginecológico realizado en una clínica de Crespo, un médico de apellido Nicolau dijo haberle encontrado un tumor, por lo cual la operó en forma inmediata.
Cuando terminó la intervención el médico le informó al padre de la adolescente que no era un tumor, sino un riñón el que le había extirpado. Se trataba del único riñón que tenía la joven, porque padecía una malformación de nacimiento.

El abogado Hernán García Guifré, quien trabajó en el caso junto al abogado Mario Paz, recordó que el de Karen Peralta «fue un caso emblemático. El órgano que le extirpó era de vital importancia, le provocó un daño en la salud de la clienta, que fue desastroso. Ella tuvo que hacerse diálisis, luego un trasplante. Lamentablemente por todas las consecuencias, terminó falleciendo en 2016«.

García Guifré mencionó que no es más el abogado de la familia, aunque conoce de las acciones que se realizaron ya que trabajó durante más de 10 años en el caso.

Al mismo tiempo, el letrado contó que lleva adelante dos causas más de mala praxis, que acontecieron en la provincia. 

Mencionó el caso ocurrido en la ciudad de Santa Elena. «En enero de 2016 por una práctica de una cirugía muy sencilla, una operación de vesícula, se le aplicó una anestesia por parte del doctor Marcelo Tedesco, a María Fernanda Rodríguez, una docente de 38 años de edad. En ese momento, Tedesco no estaba matriculado ni autorizado por el Estado provincial para actuar como anestesista. Sin embargo actuaba como tal, pasaba sus honorarios por las obras sociales, con una irregularidad notable en la práctica administrativa y en la práctica médica. A raíz de esa intervención mi clienta sufrió de una paraplejia de los miembros inferiores«, expresó el letrado.

En tanto, dijo que lleva adelante otro caso, «de una clienta que sufrió y está con las complicaciones médicas de la práctica de una anestesia, tras la cual quedó con una dificultad motriz importante». Elonce.com.

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